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La silla de oficina es, casi con toda seguridad, uno de los elementos más importantes de la oficina, recuerda que comodidad está directamente relacionado con productividad. Por ello, es importante tener en cuenta la importancia de la ergonomía y considerar numerosos factores a la hora de valorar cómo tiene que ser una silla ergonómica.
¿Cómo tiene que ser una silla ergonómica? Silla de oficina
De acuerdo con la Asociación Internacional de Ergonomía, es el conjunto de conocimientos empleados para que el trabajo, los sistemas y demás se adapten a la capacidad y los límites físicos y mentales de una persona. Este concepto se puede alcanzar prestando atención a distintas funcionalidades de la silla de oficina
Regulación lumbar
La espalda es una de las partes del cuerpo que más se resiente cuando mantenemos una mala postura durante un largo periodo de tiempo. En este sentido, el sistema de regulación lumbar se encarga, por medio de varios componentes, de adaptar el espaldar de la silla a nuestra zona lumbar.
Tejidos
En primer lugar, tenemos las sillas de piel sintética. Aportan frescura y comodidad, además de ser un material más blando que otros. Por otro lado, la tela es una opción bastante barata que tiene, como principal punto fuerte, una gran absorción del sudor. De igual modo, la malla es la opción más ergonómica, ya que se adapta perfectamente al cuerpo.
Balanceo
Este sistema, también conocido como sistema basculante, permite balancearnos suavemente mientras los pies se mantienen en el suelo. Permite ajustar la dureza y la inclinación que queramos a nuestro gusto en cada momento.
Apoyabrazos 3D blandos
Generalmente, se puede mover en tres direcciones: hacia atrás o delante, por altura y de forma lateral. Aporta confort debido a que permite regular a qué altura deseamos tener nuestros brazos a la hora de teclear. Asimismo, conviene que esté acolchado para que descansen de manera óptima.
Disipación de la electricidad
Las descargas de electricidad estática ocurren con frecuencia al pasar bastantes horas en la silla de oficina. Si bien no suponen un peligro para la salud, pueden llegar a resultar molestas. Por tanto, este sistema emplea una serie de cables que recorren la silla para disipar la electricidad.
Ruedas de goma
Este tipo de ruedas es ideal para pequeños desplazamientos en la oficina, como para ir a la impresora, a la ventana o a una estantería. De la misma manera, minimiza los ruidos al moverse y evita rayar el suelo.
Cabecero
El hecho de contar con esta función dependerá de nosotros. Este modelo está ampliamente recomendado para quienes se sientan con malas posturas. Sin embargo, si la silla cuenta con otros sistemas de adaptación, se puede prescindir.
Como has podido ver, a la hora de escoger una silla de oficina, se debe tener en cuenta la importancia de la ergonomía . De esta forma, podremos estar trabajando el tiempo que necesitemos sin sufrir dolores de espalda o en las articulaciones.
